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Meditación

 

Amad al prójimo como a vosotros mismos y habréis conseguido el fin principal de la oración. San Pío de Pieltrecina

Aunque no logréis hacer una meditación perfecta, no desistáis por ello. Si las distracciones se multiplican, no os desaniméis. Ejercitaos en la paciencia, os enriquecéis lo mismo. San Pío de Pieltrecina

Buscad leyendo y hallaréis meditando. San Juan De La Cruz

Conténtate de comenzado poco a poco hasta que tus piernas te consientan correr, mejor todavía, tus alas, volar. Date por satisfecho obedeciendo. Esto no es poco ni fácil para un alma consagrada a Dios. San Pío de Pieltrecina

Conténtate, por ahora, de ser una abeja recién nacida. San Pío de Pieltrecina

Descubrí el secreto del mar al meditar acerca de una gota de rocío. Kahlil Gibran

Determinad cuánto durará la meditación y no capituléis antes de tiempo, incluso a costa de grandes sacrificios. San Pío de Pieltrecina

El que medita, dirige sus pensamientos a Dios, espejo de su alma. Trata de conocer sus defectos. Hace lo posible por corregirlos. Frena sus impulsos. Ordena su conciencia. San Pío de Pieltrecina

En los libros se busca a Dios. En la meditación se le encuentra. San Pío de Pieltrecina

Es fundamental dedicar media hora a la meditación; si estás muy ocupado, entonces precisarás una hora.  San Francisco de Sales

La meditación fortifica a los fuertes y debilita a los débiles. Benjamin  Constant de Rebecque

La meditación no es un medio para elevarse hacia Dios, sino un fin. Tiende a amar a Dios y al prójimo. Amada Dios con toda vuestra alma y sin reservas. Padre Pío

La primera parte os sirva para la segunda, pero cuando el buen Dios os sitúa ya en la segunda, no queráis retroceder, lo estropearías todo. San Pío de Pieltrecina

Medito sobre la constante Presencia de Dios, con su gran Amor hacia mí, en medio de tantas otras presencias que me alejan de El. Espacio Sagrado

Por favor os lo pido, no estropeéis la obra de Díos en vosotros.  Cuando notéis que vuestra alma siente deseos irresistibles de contemplar a Dios o en Sí mismo, o en sus atributos, dadle libertad y no pretendáis ascender hasta Él con razonamientos y más razonamientos, primera parte de la meditación, antes bien procurad acceder afectivamente a Dios, segunda parte de la meditación, y, osaría decir, la definitiva. San Pío de Pieltrecina

¿Por qué os afligís si no llegáis a meditar tal y como quisierais? San Pío de Pieltrecina

Pronto crecerás y serás abeja adulta y producirás miel. Cuando andes mal de tiempo, es mejor La meditación que la oración, pues es más fructuosa. San Pío de Pieltrecina

Quien no medita, es como el que no se mira nunca al espejo. No le importa salir desaliñado, pues, aún sin saberlo, puede haberse ensuciado. San Pío de Pieltrecina

Ten paciencia y persevera en el santo ejercicio de la meditación. San Pío de Pieltrecina