Sumos Pontífices
Benedicto XVI
Eucaristía
AÑO 2005
MAYO
*La finalidad de esta comunión, de este comer, es la asimilación de mi vida a
la suya, mi transformación y configuración con Aquel que es amor vivo
(Homilía, 26 de mayo).
*La comunión implica la voluntad de seguir a Cristo, de seguir a Aquel que va
delante de nosotros (Homilía, 26 de mayo).
*No podemos comulgar con el Señor, si no comulgamos entre nosotros (Homilía,
29 de mayo).
JULIO
*Es importante que la existencia del cristiano se centre en la Eucaristía
(Discurso, 7 de julio).
AGOSTO
*En la Eucaristía la adoración debe llegar a ser unión (Homilía, 21 de
agosto).
*En la celebración eucarística la adoración llega a
ser unión. Dios no solamente está
frente a nosotros, como el totalmente otro.
Está dentro de nosotros, y nosotros estamos en él (Homilía, 21 de agosto).
*El Cuerpo y la Sangre de Cristo se nos dan para que también nosotros mismos
seamos transformados. Nosotros mismos debemos llegar a ser Cuerpo de Cristo,
sus consanguíneos (Homilía, 21 de agosto).
*Todos comemos el único pan, y esto significa que entre nosotros llegamos a
ser una sola cosa (Homilía, 21 de agosto).
OCTUBRE
*En la Eucaristía contemplamos el sacramento de esta síntesis viva de la ley:
Cristo nos entrega en sí mismo la plena realización del amor a Dios y del amor
a los hermanos (Homilía, 23 de octubre).
DICIEMBRE
*La comunión me hace salir de mi mismo para ir hacia él y, por tanto, también
hacia la unidad con todos (Encíclica-14, 25 de diciembre).
*En la comunión eucarística está incluido a la vez el ser amado y el amar a
los otros (Encíclica-14, 25 de diciembre).
AÑO 2006
MARZO
*La comunión, fruto del Espíritu Santo, se alimenta con el pan eucarístico y
se manifiesta en las relaciones fraternas, en una especie de anticipación del
mundo futuro (Audiencia, 29 de marzo).
MAYO
*La Eucaristía, fuente y cumbre de la vida cristiana, nos une y nos configura
con el Hijo de Dios. También construye la Iglesia, la consolida en su unidad
de Cuerpo de Cristo (Discurso, 11 de mayo).
AÑO 2007
ENERO
*El compartir el pan eucarístico con los hermanos de la comunidad eclesial nos
impulsa a convertir “con prontitud” el amor de Cristo en generoso servicio a
los hermanos (Mensaje, 27 de enero).
MARZO
*Cuando nos alimentamos con fe de su Cuerpo y de su
Sangre, su amor pasa a nosotros y nos capacita para dar, también nosotros,
la vida por nuestros hermanos y no vivir
para nosotros mismos (Audiencia, 18 de marzo).
*La Eucaristía, distribuida a los enfermos dignamente y con espíritu de
oración, es la savia vital que los conforta e infunde en su corazón luz
interior para vivir con fe y con esperanza la condición de enfermedad y
sufrimiento (Discurso, 22 de marzo).
MAYO
*La celebración dominical de la Eucaristía ha de ser el centro de la vida
cristiana (Discurso, 13 de mayo).
JUNIO
*La Eucaristía es para los sacerdotes fuente y cumbre de su ministerio
(Discurso, 1 de junio).
*La adoración fuera de la santa misa prolonga e intensifica lo que ha
acontecido en la celebración litúrgica, y hace posible una acogida verdadera y
profunda de Cristo (Ángelus, 10 de junio).
SEPTIEMBRE
*Quien ha recibido la comunión lleva ahora en sí de un modo particular al
Señor resucitado (Ángelus, 9 de septiembre).
AÑO 2008
MAYO
*La Eucaristía es el sacramento del Dios que no nos
deja solos en el camino, sino que nos acompaña
y nos indica la dirección (Homilía, 22 de
mayo).
*La adoración eucarística es oración que prolonga la celebración y la comunión
eucarística (Homilía, 22 de mayo).
*La Eucaristía es escuela de caridad y de solidaridad (Ángelus, 25 de mayo).
JUNIO
*La Eucaristía es nuestro tesoro más valioso. Es el sacramento por excelencia;
nos introduce anticipadamente en la vida eterna; contiene todo el misterio de
nuestra salvación, y es la fuente y la cumbre de la acción y de la vida de la
Iglesia (Homilía, 22 de junio).
*La recepción de la Eucaristía, la adoración del Santísimo Sacramento nos
permite entrar en comunión con Cristo, y a través de él, con toda la Trinidad,
para llegar a ser lo que recibimos y para vivir en comunión con la Iglesia
(Homilía, 22 de junio).
*La Eucaristía es el sacramento de la unidad de la Iglesia, porque todos
formamos un solo cuerpo, cuya cabeza es el Señor (Homilía, 22 de junio).
SEPTIEMBRE
*Dios está
presente en el altar, pero también está
presente en el altar de nuestro corazón cuando en la comunión le recibimos en
el sacramento de la Eucaristía (Homilía, 13 de septiembre).
DICIEMBRE
*En la Eucaristía Cristo nos da su cuerpo, se da a sí mismo en su cuerpo y así
nos transforma en su cuerpo, nos une a su cuerpo resucitado (Audiencia, 10 de
diciembre).
*En la sagrada Comunión Cristo, el Señor, nos asimila a sí, nos introduce en
su Cuerpo glorioso y así todos juntos llegamos a ser su Cuerpo (Audiencia, 10
de diciembre).
AÑO
2009
FEBRERO
*En torno a la Eucaristía nace y crece la Iglesia, la gran familia de los
cristianos (Mensaje, 22 de febrero).
*Los bautizados, alimentados con el mismo pan eucarístico, no pueden
permanecer indiferentes cuando falta el pan en la mesa de los hombres
(Discurso, 27 de febrero).
JUNIO
*La
Eucaristía, renovando el sacrificio de la
Cruz, nos hace capaces de vivir fielmente la comunión con Dios (Homilía, 11 de
junio).
*Con la Eucaristía el cielo viene a la tierra, el mañana de Dios desciende al
presente y el tiempo es como abrazado por la eternidad divina (Homilía, 11 de
junio).
JULIO
*La Eucaristía es el sacramento en el que se concentra toda la obra de la
Redención: en Jesús Eucaristía podemos contemplar la transformación de la
muerte en vida, de la violencia en amor (Homilía, 4 de julio).
AGOSTO
*La comunión eucarística tiende a una transformación total de la propia vida
(Audiencia, 5 de agosto).
DICIEMBRE
*En la Eucaristía está presente realmente Cristo resucitado –con su cuerpo
resucitado-, que se pone en nuestras manos para sacarnos de nosotros mismos,
incorporarnos a su cuerpo inmortal y guiarnos hacia la vida nueva (Audiencia,
9 de diciembre).
AÑO 2010
FEBRERO
*La
Eucaristía
no sólo es fuente y culmen de la vida de la Iglesia, sino también de su misión
(Mensaje, 6 de febrero).
ABRIL
*En la santa Comunión recibimos el Cuerpo del Señor resucitado y nosotros
mismos somos incorporados a este Cuerpo, de manera que estamos ya resguardados
en Aquel que ha vencido a la muerte y nos conduce a través de la muerte
(Homilía, 3 de abril).
JUNIO
*La Eucaristía es el memorial de la muerte y resurrección de Jesucristo, de su
amor hasta el final por cada uno de nosotros, memorial que él quiso confiar a
la Iglesia para que se celebrara a lo largo de los siglos (Discurso, 15 de
junio).
*Invito a todos a redescubrir la fecundidad de la adoración eucarística:
delante del Santísimo Sacramento experimentamos de modo totalmente especial el
«permanecer» de Jesús que él mismo, en el Evangelio de san Juan, pone como
condición necesaria para dar mucho fruto (Discurso, 15 de junio).
*La comunión con Cristo también es siempre comunión con su cuerpo que es la
Iglesia (Discurso, 15 de junio).
*La Eucaristía es la que transforma a un simple grupo de personas en comunidad
eclesial: la Eucaristía hace la Iglesia (Discurso, 15 de junio).
*Al recibir el Sacramento, entramos en comunión de sangre con Jesucristo. En
la concepción judía, la sangre indica la vida; así, podemos decir que,
alimentándonos del cuerpo de Cristo, acogemos la vida de Dios y aprendemos a
mirar la realidad con sus ojos, abandonando la lógica del mundo para seguir la
lógica divina del don y de la gratuidad (Discurso, 15 de junio).
*Cuando recibimos a Cristo, el amor de Dios se expande en lo íntimo de nuestro
ser, modifica radicalmente nuestro corazón y nos hace capaces de gestos que,
por la fuerza difusiva del bien, pueden transformar la vida de quienes están a
nuestro lado (Discurso, 15 de junio).
*La Eucaristía celebrada nos impone y, al mismo tiempo, nos hace capaces de
ser también nosotros pan partido para los hermanos, saliendo al encuentro de
sus necesidades y entregándonos nosotros mismos (Discurso, 15 de junio).
*Una celebración eucarística que no lleve a encontrarse con los hombres allí
donde viven, trabajan y sufren, para llevarles el amor de Dios, no manifiesta
la verdad que encierra (Discurso, 15 de junio).
SEPTIEMBRE
*De un modo especial la sagrada Eucaristía constituye, en el corazón de la
Iglesia, una fuente inagotable de comunión para toda la humanidad (Mensaje, 27
de septiembre).
*Palabra y Eucaristía se pertenecen tan íntimamente que no se puede comprender
la una sin la otra: la Palabra de Dios se hace sacramentalmente carne en el
acontecimiento eucarístico (Exhortación Apostólica-55, 30 de septiembre).
*La Eucaristía nos ayuda a entender la Sagrada Escritura, así como la Sagrada
Escritura, a su vez, ilumina y explica el misterio eucarístico (Exhortación
Apostólica-55, 30 de septiembre).
*Cristo, realmente presente en las especies del pan y del vino, está presente
de modo análogo también en la Palabra proclamada en la liturgia (Exhortación
Apostólica-56, 30 de septiembre).
OCTUBRE
*La Eucaristía, como presencia del amor humano-divino de Jesucristo, supone
continuamente el paso de Jesús a los hombres que serán sus miembros, que serán
ellos mismos Eucaristía (Discurso 4 de octubre).
*La Eucaristía es el centro de nuestra relación con Dios y de la configuración
de nuestra vida (Carta, 18 de octubre).
NOVIEMBRE
*El don de Cristo y de su Espíritu, que recibimos en la Eucaristía, cumple con
plenitud sobreabundante los anhelos de unidad fraterna que se albergan el
corazón humano, y al mismo tiempo los eleva muy por encima de la simple
experiencia de la convivencia humana (Discurso, 11 de noviembre).
*Mediante la comunión con el Cuerpo de Cristo, la Iglesia va siendo cada vez
más ella misma: misterio de unidad “vertical” y “horizontal” para todo el
género humano (Discurso, 11 de noviembre).
*La Eucaristía, formando continuamente a la Iglesia, crea también comunión
entre los hombres (Discurso, 11 de noviembre).
*En la Eucaristía está encerrado el tesoro de la Iglesia, es decir, el mismo
Cristo, que en la Cruz se inmoló por la salvación de la humanidad (Discurso,
11 de noviembre).
*La fidelidad al encuentro con el Cristo Eucarístico en la Santa Misa
dominical es esencial para el camino de fe, pero intentemos también ir
frecuentemente a visitar al Señor presente en el Tabernáculo! (Audiencia, 17
de noviembre).
*La Eucaristía es un extraordinario don de amor que Dios nos renueva
continuamente para nutrir nuestro camino de fe, revigorizar nuestra esperanza,
inflamar nuestra caridad, para hacernos cada vez más semejantes a Él
(Audiencia, 24 de noviembre).
DICIEMBRE
*Alimentados por Cristo, también nosotros somos atraídos en el mismo acto de
ofrenda total, que impulsó al Señor a dar su propia vida, revelando de se modo
el inmenso amor del Padre (Homilía, 31 de diciembre).
AÑO 2011
ENERO
*La comunión con Dios, realizada como comunión fraterna, se expresa, en
concreto, en el compromiso social, en la caridad cristiana, en la justicia
(Audiencia, 19 de enero).
*La comunión en el sacrificio de Cristo es el culmen de nuestra unión con Dios
y, por lo tanto, representa también la plenitud de la unidad de los discípulos
de Cristo, la comunión plena (Audiencia, 19 de enero).
FEBRERO
*De la adoración eucarística nace la compasión por todos los hombres y de esta
compasión nace la sed de evangelizar (Discurso, 3 de febrero)
*Una vida auténticamente eucarística es una vida misionera (Discurso, 3 de
febrero).
*Partir el pan, la santa Eucaristía, es el centro de la Iglesia y debe ser el
centro de nuestro ser cristianos y de nuestra vida sacerdotal. El Señor se nos
da (Homilía, 5 de febrero).
*Partir el pan: así se expresa asimismo el compartir, el transmitir nuestro
amor a los demás. La dimensión social, el compartir no es un apéndice moral
que se añade a la Eucaristía, sino que es parte de ella (Homilía 5 de
febrero).
ABRIL
*La comunión eucarística exige la fe, pero la fe requiere el amor, de lo
contrario también como fe está muerta (Homilía, 21 de abril).
*El objetivo propio y último de la transformación eucarística es nuestra
propia transformación en la comunión con Cristo (Homilía, 21 de abril).
*La Eucaristía apunta al hombre nuevo, al mundo nuevo (Homilía, 21 de abril).
*El pan es uno, y así nosotros, aunque somos
muchos, formamos un solo cuerpo, porque comemos todos del mismo pan» (1
Co 10, 16s). La Iglesia nace con la
Eucaristía (Homilía, 21 de abril).
*Todos nosotros comemos del mismo pan, recibimos el mismo cuerpo del Señor y
eso significa: Él nos abre a cada uno más allá de sí mismo. Él nos hace uno
entre todos nosotros (Homilía, 21 de abril).
*La Eucaristía es el misterio de la íntima cercanía y comunión de cada uno con
el Señor. Y, al mismo tiempo, es la unión visible entre todos (Homilía, 21 de
abril).
*La Eucaristía es sacramento de la unidad. Llega hasta el misterio trinitario,
y crea así a la vez la unidad visible (Homilía, 21 de abril).
*La eucaristía es el encuentro personalísimo con el Señor y, sin embargo,
nunca es un mero acto de devoción individual. La celebramos necesariamente
juntos. En cada comunidad está el Señor en su totalidad. Pero es el mismo en
todas las comunidades (Homilía, 21 de abril).
MAYO
*La Eucaristía es la máxima expresión del don que Jesús hace de sí mismo y es
una invitación constante a vivir nuestra existencia en la lógica eucarística,
como un don a Dios y a los demás (Homilía, 8 de mayo).
JUNIO
*La palabra «comunión», que usamos también para designar la Eucaristía, resume
en sí misma la dimensión vertical y la dimensión horizontal del don de Cristo
(Homilía, 23 de junio).
*Es bella y muy elocuente la expresión «recibir la comunión» referida al acto
de comer el Pan eucarístico. Cuando realizamos este acto, entramos en comunión
con la vida misma de Jesús, en el dinamismo de esta vida que se dona a
nosotros y por nosotros. Desde Dios, a través de Jesús, hasta nosotros: se
transmite una única comunión en la santa Eucaristía (Homilía, 23 de junio).
*Mientras que el alimento corporal es asimilado por nuestro organismo y
contribuye a su sustento, en el caso de la Eucaristía se trata de un Pan
diferente: no somos nosotros quienes lo asimilamos, sino él nos asimila a sí,
para llegar de este modo a ser como Jesucristo, miembros de su cuerpo, una
cosa sola con él (Homilía, 23 de junio).
*La Eucaristía, mientras nos une a Cristo, nos abre también a los demás, nos
hace miembros los unos de los otros: ya no estamos divididos, sino que somos
uno en él (Homilía, 23 de junio).
*La comunión eucarística me une a la persona que tengo a mi lado, y con la
cual tal vez ni siquiera tengo una buena relación, y también a los hermanos
lejanos, en todas las partes del mundo (Homilía, 23 de junio).
*Quien reconoce a Jesús en la Hostia santa, lo reconoce en el hermano que
sufre, que tiene hambre y sed, que es extranjero, que está desnudo, enfermo o
en la cárcel; y está atento a cada persona, se compromete, de forma concreta,
en favor de todos aquellos que padecen necesidad (Homilía, 23 de junio).
*Mediante el pan y el vino consagrados, en los que está realmente presente su
Cuerpo y su Sangre, Cristo nos transforma, asimilándonos a él: nos implica en
su obra de redención, haciéndonos capaces, por la gracia del Espíritu Santo,
de vivir según su misma lógica de entrega, como granos de trigo unidos a él y
en él (Homilía, 23 de junio).
*La Eucaristía es, de hecho, la que hace de una comunidad humana un misterio
de comunión, capaz de llevar a Dios al mundo y el mundo a Dios Ángelus, 26 de
junio).
*El Espíritu Santo, que convierte el pan y el vino en el Cuerpo y la Sangre de
Cristo, transforma también en miembros del cuerpo de Cristo a cuantos lo
reciben con fe, de forma que la Iglesia es realmente sacramento de unidad de
los hombres con Dios y entre sí (Ángelus, 26 de junio).
JULIO
*Recordemos siempre que en los sacramentos, sobre todo en la
Eucaristía,
el Señor Jesús actúa para la transformación de los hombres haciéndonos
semejantes a sí (Discurso, 2 de julio).
AGOSTO
*La
Eucaristía es la expresión real de esa entrega incondicional de Jesús por
todos, también por los que le traicionaban
SEPTIEMBRE
*La comunión eucarística nos arranca de nuestro individualismo, nos comunica
el espíritu de Cristo muerto y resucitado, nos conforma a él; nos une
íntimamente a los hermanos en el misterio de comunión que es la Iglesia
(Homilía, 11 de septiembre).
*La Eucaristía sostiene y transforma toda la vida cotidiana (Homilía, 11 de
septiembre).
*Nutrirse de Cristo es el camino para no permanecer ajenos o indiferentes ante
la suerte de los hermanos, sino entrar en la misma lógica de amor y de
donación del sacrificio de la cruz (Homilía, 11 de septiembre).
*Una espiritualidad eucarísticaes un auténtico antídoto ante el individualismo
y el egoísmo (Homilía, 11 de septiembre).
*Una espiritualidad eucarística nos ayudará también a acercarnos a las
diversas formas de fragilidad humana (Homilía, 11 de septiembre).
*No hay nada auténticamente humano que no encuentre en la Eucaristía la forma
adecuada para ser vivido en plenitud (Homilía, 11 de septiembre).
*Sigue siendo importante la relación con la savia vital de la
Eucaristía,
porque sin Cristo no podemos hacer nada (Discurso, 24 de septiembre).
OCTUBRE
*El Señor viene en la
Eucaristía para sacarnos de nuestro individualismo,
de nuestros particularismos que excluyen a los demás, para hacer de nosotros
un solo cuerpo, un solo reino de paz en un mundo dividido (Audiencia, 26 de
octubre).
NOVIEMBRE
*Los discípulos del Señor, unidos a Cristo mediante la
Eucaristía,
viven en una comunión que los vincula los unos a los otros como miembros de un
solo cuerpo (Mensaje, 3 de noviembre).
* La adoración eucarística, personal y comunitaria, permite profundizar este
gran misterio (Exhort. Apost Africae Munus 153, 19 de noviembre).
AÑO 2012
ENERO
*La Eucaristía es alimento de los peregrinos que se convierte en fuerza
incluso para quien está cansado, extenuado y desorientado (Audiencia, 11 de
enero).
*Participando en la Eucaristía, nutriéndonos de la carne y de la Sangre del
Hijo de Dios, unimos nuestra oración a la del Cordero pascual (Audiencia, 11
de enero).
FEBRERO
*La contemporaneidad de Jesús se revela de modo especial en la Eucaristía, en
la que él está presente con su pasión, muerte y resurrección (Mensaje, 9 de
febrero).
*La Eucaristía es precisamente
Sacramentum caritatis Christi,
mediante el cual él continúa
atrayendo a todos hacia sí, como lo hizo
desde lo alto de la cruz (Homilía, 19 de febrero).
MARZO
*Cada domingo, en la
Eucaristía,
las comunidades cristianas celebran el Misterio central de la salvación: la
muerte y resurrección de Cristo (Mensaje, 15 de marzo).
*Pidamos que cada vez que participemos en la
Eucaristía
nos hagamos también testigos de la caridad, que responde al mal con el bien,
ofreciéndonos como hostia viva a quien amorosamente se entregó por nosotros
(Homilía, 28 de marzo).
JUNIO
*El Sacramento de la caridad de Cristo debe permear toda la vida cotidiana (Homilúia,
7 de junio).
*Es un error contraponer la celebración y la adoración, como si estuvieran en
competición una contra otra (Homilía, 7 de junio).
*En el momento de la adoración todos estamos al mismo nivel, de rodillas ante
el Sacramento del amor. El sacerdocio común y el ministerial se encuentran
unidos en el culto eucarístico (Homilía, 7 de junio).
*Comunión y contemplación no se pueden separar, van juntas (Homilía, 7 de
junio).
*En la verdadera comunión, preparada por el coloquio de la oración y de la
vida, podemos decir al Señor palabras de confianza (Homilía, 7 de junio).
*Por nuestra participación en la Eucaristía, entramos en comunión con Cristo y
se hace visible en la tierra la comunión con los demás. Recibimos también la
prenda de la vida eterna futura (Vídeo Mensaje, 17 de junio).
*La Eucaristía es el culto de toda la Iglesia, pero requiere igualmente el
pleno compromiso de cada cristiano en la misión de la Iglesia; implica una
llamada a ser pueblo santo de Dios, pero también a la santidad personal (Vídeo
Mensaje, 17 de junio).
*La Eucaristía es el memorial del sacrificio de Cristo en la cruz; su cuerpo y
su sangre instauran la nueva y eterna Alianza para el perdón de los pecados y
la transformación del mundo (Vídeo Mensaje, 17 de junio).
Recopilados por: P. Mariano Esteban Caro
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