Sumos Pontífices
Benedicto XVI
Creyente
AÑO 2005
MAYO
*Cristo resucitado necesita testigos que se hayan
encontrado con Él, hombres que lo hayan conocido íntimamente a través de la
fuerza del Espíritu Santo (Homilía, 7 de mayo).
JUNIO
*Tener los mismos sentimientos de Jesús significa
no considerar el poder, la riqueza, el prestigio como los valores supremos de
nuestra vida (Audiencia, 1 de junio).
AGOSTO
*El secreto de la santidad es la amistad con Cristo
y la adhesión a su voluntad (Discurso, 19 de agosto).
*Quien ha descubierto a Cristo debe llevar a otros
hacia él (Homilía, 21 de agosto).
*A menudo la religión se convierte en un producto
de consumo. La religión buscada a la medida de cada uno, a la postre no nos
ayuda (Homilía, 21 de agosto).
*Todos juntos debemos tratar de encontrar modos
nuevos de llevar el Evangelio al mundo actual, anunciar de nuevo a Cristo y
establecer la fe (Discurso, 21 de agosto).
OCTUBRE
*“Tened los sentimientos de Cristo Jesús”: aprender
a sentir como sentía Jesús, conformar nuestro modo de pensar, de decir, de
actuar, a los sentimientos de Jesús (Audiencia, 26 de octubre).
NOVIEMBRE
*La palabra de Dios nos estimula decididamente a la
madurez y nos invita a comprometernos con todas nuestras fuerzas e un alto
grado de humanidad (Mensaje, 5 de noviembre).
*El Señor sabe suplir siempre nuestras posibles
lagunas y la pobreza de los medios a nuestra disposición (Discurso, 12 de
noviembre).
*Lo que cuenta no es tanto la eficiencia de nuestra
organización, sino más bien la confianza inquebrantable en Cristo (Discurso,
12 de noviembre).
DICIEMBRE
*El testimonio de fe de los laicos es
particularmente elocuente y eficaz, porque se da en la realidad diaria y en
los ámbitos a los que un sacerdote accede con dificultad (Discurso, 3 de
diciembre).
*No se comienza a ser cristiano por una decisión
ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una
Persona, que da nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación
decisiva (Encíclica-l, 25 de diciembre).
*El programa del cristiano es un “corazón que ve”
(Encíclica-31, 25 de diciembre).
AÑO 2006
MARZO
*En el tiempo de la peregrinación terrena, el
discípulo, mediante la comunión con el Hijo, ya puede participar de la vida
divina de él y del Padre (Audiencia, 29 de marzo).
ABRIL
*Viviremos mediante la comunión existencial con
Cristo, que es la vida misma (Homilía, 15 de abril).
*La vida eterna, la inmortalidad beatífica, no la
tenemos por nosotros mismos ni en nosotros mismos, sino por una relación,
mediante la comunión existencial con aquél que es la Verdad y el Amor y, por
tanto es eterno, es Dios mismo (Homilía, 15 de abril).
*La vida nos llega del ser amados por aquel que es
la Vida; nos viene del vivir con él y del amar con él (Homilía, 15 de abril).
MAYO
*Quien acepta el amor de Dios interiormente queda
modelado por él (Carta, 15 de mayo).
*El hombre vive la experiencia del amor de Dios
como una “llamada” a la que tiene que responder (Carta, 15 de mayo).
*Llevad la luz de Cristo a todos los ambientes
sociales y culturales en los que vivís (Mensaje, 22 de mayo).
*Iluminad la oscuridad de un mundo trastornado por
los mensajes contradictorios de las ideologías (Mensaje, 22 de mayo).
*Llevad a este mundo turbado el testimonio de la
libertad con la que Cristo nos ha liberado (Mensaje, 22 de mayo)
*Todo cristiano debe confrontar continuamente sus
propias convicciones con los dictámenes del Evangelio y de la Tradición de la
Iglesia (Homilía, 26 de mayo).
*Sólo la verdad íntegra nos puede llevar a la
adhesión a Cristo, muerto y resucitado por nuestra salvación (Homilía, 26 de
mayo).
JUNIO
*El cristiano no se contenta con palabras, y
tampoco con ideologías engañosas (Discurso, 5 de junio).
SEPTIEMBRE
*Cuando creer se reemplaza por “hacer”, y el
testimonio por el discurso sobre “cuestiones”, urge recuperar la alegría
profunda y el estupor de los primeros discípulos (Discurso, 8 de septiembre).
OCTUBRE
*De la fuerza de este amor a Cristo, de la firme fe
en la resurrección de Jesús que funda la esperanza, nace y se renueva
constantemente nuestro testimonio cristiano (Homilía, 19 de octubre).
*El cristiano está abierto a todo lo que hay de
justo, verdadero y puro en las culturas y en las civilizaciones, a lo que
alegra, consuela y fortalece nuestra existencia (Discurso, 19 de octubre).
NOVIEMBRE
*Para nosotros, los cristianos “vida eterna” no
indica sólo una vida que dura para siempre, es más bien una nueva calidad de
existencia, plenamente inmersa en el amor de Dios, que libra del mal y de la
muerte y nos pone en comunión con todos los hermanos y las hermanas que
participan del mismo amor (Ángelus, 1 de noviembre).
*La eternidad ya puede estar presente en el centro
de la vida terrena y temporal, cuando el alma, mediante la gracia, está unida
a Dios, su fundamento último (Ángelus, 1 de noviembre).
*Aprendemos los sentimientos de Jesús cuando
aprendemos a pensar como él (Homilía, 7 de noviembre).
*Si tenemos los mismos sentimientos de Cristo, si
comenzamos a ejercitarnos en pensar como él y con él, entonces se despierta en
nosotros la alegría con respecto a Dios, la convicción de que él es el más
fuerte (Homilía, 7 de noviembre).
DICIEMBRE
*Que todo cristiano se sienta comprometido a ser un trabajador incansable en
favor de la paz y un valiente defensor de la dignidad de la persona humana y
de sus derechos inalienables (Mensaje, 8 de diciembre).
AÑO 2007
ENERO
*El amor que Jesús trajo al mundo al nacer en Belén
une a los que le acogen en una relación duradera de amistad y fraternidad
(Audiencia, 3 de enero).
*Es importante que los cristianos profundicen y
asuman el estilo de vida propio de los discípulos de Jesús, sencillo y alegre,
con una fe sólida arraigada en lo más íntimo de su corazón y alimentada por la
oración y los sacramentos (Discurso, 20 de enero).
FEBRERO
*Todo encuentro con Cristo exige un profundo cambio
de mentalidad (Discurso, 3 de febrero).
*El encuentro con Cristo, el dedicarse a su
seguimiento, abre de par en par e impulsa el encuentro con cualquiera, porque
si Dios se realiza sólo en la comunión trinitaria, también el hombre
encontrará su plenitud sólo en la comunión (Discurso, 3 de febrero).
*El deseo sincero de Dios nos lleva a evitar el mal
y a hacer el bien (Audiencia, 21 de febrero).
*Contemplando a Cristo, sintámonos contemplados por
él (Ángelus, 25 de febrero).
ABRIL
*Reconocer a Cristo como rey significa aceptar día
a día su palabra como criterio válido para nuestra vida (Homilía, 1 de abril).
*La expresión “seguimiento de Cristo” es una
descripción de toda la existencia cristiana en general (Homilía, 1 de abril).
*Es puro un corazón que no se extravía en la
embriaguez del placer; un corazón cuyo amor es verdadero y no solamente pasión
de un momento (Homilía, 1 de abril).
*Servir a Cristo es ante todo una cuestión de amor (Homilía, 22 de abril).
MAYO
*La
vida cristiana no se expresa solamente en las virtudes personales, sino
también en las virtudes sociales y políticas (Discurso, 13 de mayo).
*Quien acepta a Cristo, “camino, verdad y vida”, en
su totalidad, tiene garantizada la paz y la felicidad, en esta y en la otra
vida (Discurso, 12 de mayo).
*Es necesario que los cristianos experimenten que
no siguen a un personaje de la historia pasada, sino a Cristo vivo, presente
en el hoy y el ahora de sus vidas. Él es el viviente que camina a nuestro lado
(Discurso, 13 de mayo).
JUNIO
*El testigo de Cristo no transmite sólo
informaciones, sino que está comprometido personalmente con la verdad que
propone, y con la coherencia de su vida resulta punto de referencia digno de
confianza (Discurso, 11 de junio).
*Los fieles católicos, que están llamados a
ocuparse de las realidades temporales para ordenarlas según la voluntad
divina, han de ser testigos valientes de su fe en los diferentes ámbitos de la
vida pública (Discurso, 30 de junio).
JULIO
*Los laicos han de ser fermento en medio de la
sociedad (Discurso, 5 de julio).
*Sólo podemos ser testigos de Cristo si nos dejamos
guiar por el Espíritu Santo (Mensaje, 20 de julio).
*Proponer a Cristo no significa imponerlo (Mensaje,
20 de julio).
SEPTIEMBRE
*El camino de la humildad no es un camino de
renuncia, sino de valentía (Homilía, 2 de septiembre).
*El primer desafío a afrontar sigue siendo siempre
seguir a Cristo a fondo, sin reservas ni componendas (Homilía, 2 de
septiembre).
*No podemos llamarnos discípulos de Jesús si no
amamos y no seguimos a su Iglesia (Homilía, 2 de septiembre).
*Nuestro compromiso diario debe consistir en vivir
aquí abajo como si estuviéramos allá arriba (Homilía, 2 de septiembre).
*La motivación fundamental de todos los creyentes
en Cristo no es el éxito, sino el bien, un bien que es tanto más auténtico
cuanto más se comparte, y que no consiste principalmente en el tener o en el
poder, sino en el ser (Homilía, 2 de septiembre).
*Seguir a Cristo implica un esfuerzo constante por
contribuir a la edificación de una sociedad más justa y solidaria (Homilía, 2
de septiembre).
*El cristianismo es algo más, algo distinto de un
sistema moral, una serie de preceptos y leyes. Es el don de una amistad que
perdura en la vida y en la muerte (Homilía, 8 de septiembre).
*Seguir a Cristo significa asimilar cada vez más
los sentimientos y el estilo de vida de Jesús (Discurso, 8 de septiembre).
NOVIEMBRE
*Ante el sufrimiento y la enfermedad los creyentes
están invitados a no perder la serenidad, porque nada, ni siquiera la muerte
puede separarnos del amor de Cristo (Discurso, 17 de noviembre).
AÑO 2008
ENERO
*La moderación no sólo es una regla ascética, sino también un camino de
salvación para la humanidad (Homilía, 6 de enero).
MARZO
*Los creyentes no son nunca totalmente extraños el
uno para el otro (Homilía, 22 de marzo).
ABRIL
*Hay que fomentar una identidad católica basada no
tanto en elementos externos, sino más bien en un modo de pensar y actuar
enraizado en el Evangelio y enriquecido con la tradición viva de la Iglesia
(Encuentro, 16 de abril).
*Es inconcebible que los creyentes tengan que
suprimir una parte de sí mismos –su fe- para ser ciudadanos activos (Discurso,
18 de abril).
*Nunca debe ser necesario renegar de Dios para
poder gozar de los propios derechos (Discurso, 18 de abril).
MAYO
*Cada uno puede hallar su propio camino, si se
encuentra con Aquel que es Palabra y Pan de vida, y se deja guiar por su
amigable presencia (Homilía, 22 de mayo).
JUNIO
*Alimentad constantemente la unión con el Señor en
la oración y con la recepción frecuente de los sacramentos, especialmente de
la Eucaristía y la Confesión (Discurso, 2 de junio).
*Aprendamos a ofrecer a Dios, rico en misericordia,
las pequeñas pruebas de la existencia diaria, insertándolas humildemente en el
gran com-padecer de Jesús (Discurso, 9 de junio).
*Cristo es la respuesta a vuestros interrogantes y
problemas; en él se valora toda aspiración honrada del ser humano (Discurso,
14 de junio).
JULIO
*La tarea del testigo no es fácil. Hoy muchos
sostienen que a Dios se le debe dejar en el banquillo (Discurso, 17 de julio).
AGOSTO
*Si vivimos con Cristo, también las cosas humanas
nos saldrán bien (Discurso, 6 de agosto).
*Deberíamos poner mucha atención en realizar bien y
de modo correcto nuestros deberes humanos (Discurso, 6 de agosto).
OCTUBRE
*La lectura y meditación de la Sagrada Escritura,
en privado o en comunidad, llevará a la intensificación de la vida cristiana,
así como a un renovado impulso apostólico en todos los fieles (Discurso, 16 de
octubre).
*Ser discípulo de Cristo es poner en práctica sus
enseñanzas, que se resumen en el primero y mayor de los mandamientos de la Ley
divina, el mandamiento del amor (Homilía, 26 de octubre).
*La sabiduría de este mundo es un modo de vivir y
de ver las cosas prescindiendo de Dios y siguiendo las opiniones dominantes,
según los criterios del éxito y del poder (Discurso, 30 de octubre).
*La sabiduría divina consiste en seguir el
pensamiento de Cristo; es Cristo quien nos abre los ojos del corazón para
seguir el camino de la verdad y del amor (Discurso, 30 de octubre).
NOVIEMBRE
*El discípulo de Cristo está llamado por el Señor a
“dar razón” a todos de la belleza y de la verdad de su propia fe (Mensaje, 24
de noviembre).
*Nuestra misión diaria debe convertirse en
transparencia elocuente de la belleza del amor de Dios para que llegue de modo
eficaz a nuestros contemporáneos (Mensaje, 24 de noviembre).
DICIEMBRE
*El encuentro con Cristo renueva la existencia
personal y nos ayuda a contribuir a la construcción de una sociedad justa y
fraterna (Homilía, 31 de diciembre).
AÑO 2009
ENERO
*Hoy más que nunca se necesita el testimonio y el
compromiso público de todos los bautizados para reafirmar la dignidad y el
valor único e insustituible de la familia fundad en el matrimonio de un hombre
con una mujer y abierto a la vida, así como el de la vida humana en todas sus
etapas (Discurso, 18 de enero).
FEBRERO
*El pecado es una suerte de parálisis del espíritu,
de la que solamente puede liberarnos la fuerza del amor misericordioso de
Dios, permitiéndonos levantarnos y reanudar el camino por la senda del bien
(Ángelus, 22 de febrero).
*Esta es la vocación de los cristianos: resucitados
con Cristo, han pasado por la muerte, y su vida ya está escondida con Cristo
en Dios (Homilía, 25 de febrero).
ABRIL
*Este anuncio nítido y explícito de Cristo como
Salvador de los hombres se inserta en esa búsqueda apasionante de la verdad,
la belleza y el bien que caracteriza al ser humano (Discurso, 2 de abril).
*Todo empeño evangelizador brota de un triple amor:
a la Palabra de Dios, a la Iglesia y al mundo (Discurso, 2 de abril).
*Se ha de tener siempre muy presente que la primera
forma de evangelización es el testimonio de la propia vida (Discurso, 2 de
abril).
*El anuncio del Evangelio concierne a todos en la
Iglesia; también a los fieles laicos, destinados a esta misión gracias al
bautismo y la confirmación (Discurso, 2 de abril).
*Los seglares, conscientes de sus compromisos
bautismales, y animados por la caridad de Cristo, participen activamente en la
misión de la Iglesia así como en la vida social, política, económica y
cultural de su país (Discurso, 30 de abril).
*Los católicos deberán destacar entre sus
conciudadanos por el cumplimiento ejemplar de sus deberes cívicos, así como
por el ejercicio de las virtudes humanas y cristianas (Discurso, 30 de abril).
*El compromiso de los seglares los llevará también
a promover de modo especial aquellos valores que son esenciales al bien común
de la sociedad, el bien de la
familia fundada en el matrimonio entre un hombre y una mujer, la tutela de la
vida humana desde su concepción hasta su muerte natural, y el derecho de los
padres a educar a sus hijos según sus convicciones morales y religiosas
(Discurso, 30 de abril).
MAYO
*El verdadero discípulo de Jesucristo goza
transmitiendo gratuitamente a otros su divina Palabra y compartiendo con ellos
el amor que brota de su costado abierto en la cruz (Discurso, 18 de mayo).
*Cuando la belleza y la verdad de Cristo conquistan
nuestros corazones, experimentamos la alegría de ser sus discípulos y asumimos
de modo convencido la misión de proclamar su mensaje redentor (Discurso, 18 de
mayo).
*Nosotros nos acercamos al cielo, o mejor dicho
entramos en él, en la medida en que nos acercamos a Jesús y entramos en
comunión con él (Homilía, 24 de mayo).
*La Palabra anunciada y vivida se vuelve creíble
y se encarna en comportamientos de
solidaridad, en el compartir, en gestos que muestren el rostro de Cristo como
Amigo verdadero del hombre (Discurso, 26 de mayo).
*Nadie queda excluido de la tarea de velar por el
crecimiento propio y ajeno hacia la “madurez de la plenitud en Cristo”
(Discurso, 28 de mayo).
JUNIO
*En el trabajo, con sus ritmos frenéticos, y en los tiempos de vacaciones,
debemos reservar momentos para Dios (Audiencia, 3 de junio).
*Hace falta un laicado maduro que dé testimonio
fiel de su fe y sienta el gozo de su
pertenencia al Cuerpo de Cristo (Discurso, 8 de junio).
*La práctica de la lectio divina es la lectura
meditada y adorante de la Biblia (Homilía, 11 de junio).
*Los laicos católicos deberán demostrar, por medio
de una vida basada en la caridad, en la honradez y en el amor por el bien
común, que un buen
católico es también un buen ciudadano
(Discurso, 27 de junio).
JULIO
*La relación con Dios es algo profundamente personal (Homilía, 24 de julio).
*Tenemos
que traer una vez más a nuestro mundo la realidad de Dios, darlo a conocer y
hacerlo presente (Homilía, 24 de julio).
SEPTIEMBRE
*La comunión con Cristo crea unidad de amor entre
los cristianos (Audiencia, 9 de septiembre).
*La bondad presupone sobre todo una viva comunión
con Dios, el Bueno, una creciente unión interior con él (Homilía, 12 de
septiembre).
*Sólo si nuestra vida se desarrolla en el diálogo
con él; sólo si su ser, sus características, penetran en nosotros y nos
plasman, podemos transformarnos en siervos verdaderamente buenos (Homilía, 12
de septiembre).
*Prudencia significa ponerse a buscar la verdad y
actuar de manera conforme con ella (Homilía, 12 de septiembre).
*Si alguien dice que tiene fe, pero no ama a los
hermanos, no es un verdadero creyente (Ángelus, 13 de septiembre).
*Sólo el conocimiento personal y la unión profunda
con Cristo proporcionan la energía espiritual para realizar plenamente la
vocación cristiana (Homilía, 26 de septiembre).
*Sólo el amor de Cristo hace eficaz la acción
apostólica, sobre todo en los momentos de dificultad y de prueba (Homilía, 26
de septiembre).
*Los cristianos de hoy, abriéndose a la situación
actual y
*Hoy se necesitan personas que sean “creyentes” y
“creíbles”, dispuestas a defender en todo ámbito de la sociedad los principios
e ideales cristianos en los que se inspira su acción (Homilía, 28 de
septiembre).
*Esta es la santidad, vocación universal de todos
los bautizados, que impulsa a cumplir el propio deber con fidelidad y
valentía, mirando no al propio interés egoísta, sino al bien común, y buscando
en cada momento la voluntad divina (Homilía, 28 de septiembre).
*El ejemplo de Cristo alienta a quien se dice
cristiano a ser creíble, o sea, coherente con los principios y al fe que
profesa (Homilía, 28 de septiembre).
*No basta, en efecto, con parecer buenos y
honrados; hay que serlo realmente (Homilía, 28 de septiembre).
OCTUBRE
*El cristiano se ve impulsado a contribuir a la formación de sociedades
justas, donde todos reciban lo necesario para vivir según su propia dignidad
de hombres y donde la justicia sea vivificada por el amor (Mensaje, 30 de
octubre).
NOVIEMBRE
*La
formación verdaderamente cristiana de la conciencia es decisiva para una
profunda vida de fe (Discurso, 14 de noviembre).
*No seríamos seguidores fieles de nuestro divino
Maestro si no supiéramos llevar nuestra esperanza contra toda esperanza (Rm 4,
18) en todas las circunstancias, incluso en las más arduas (Discurso, 14 de
noviembre).
*Vivir según la voluntad de Dios hace libres y en
servirlo con fidelidad consiste el gozo pleno y verdadero
(Ángelus, 15 de noviembre).
*Elegir a Cristo no garantiza el éxito según los
criterios el mundo, pero asegura la paz, y la alegría que sólo él puede dar
(Ángelus, 22 de noviembre).
DICIEMBRE
*No se puede comprender a la persona si no es en el
misterio de Cristo, verdadero Dios y verdadero hombre, y en la comunión con
él, que se convierte en acogida de la “divino-humanidad” también en nuestra
existencia (Homilía, 17 de diciembre).
*Todo creyente está llamado a preguntar a Dios cuál
es su voluntad respecto a cada situación humana (Discurso, 17 de diciembre).
*El tiempo dedicado a Dios y, por él, al prójimo,
nunca es tiempo perdido (Homilía, misa de Nochebuena).
*Invito a todos los presentes a mirar a Cristo, el
hombre perfecto, a tomar siempre como ejemplo su manera de actuar (Mensaje, 30
de diciembre).
AÑO 2010
ENERO
*Sólo podemos ser testigos conociendo a Cristo y,
conociendo a Cristo, conociendo también a Dios (Audiencia, 20 de enero).
*Conocer a Cristo como proceso intelectual y sobre
todo existencial, es un proceso que nos hace testigos (Audiencia, 20 de
enero).
*Sólo podemos ser testigos si a Cristo lo conocemos
de primera mano y no solamente por otros, en nuestra propia vida, por nuestro
encuentro personal con Cristo (Audiencia, 20 de enero).
*Encontrándonos con Cristo realmente en nuestra vida de fe nos convertimos en
testigos y así podemos contribuir a la novedad del mundo, a la vida eterna
(Audiencia, 20 de enero).
FEBRERO
*Cuanto más nos acercamos a Dios, cuanto más cerca
estamos de él, tanto más útiles somos a los demás (Homilía, 2 de febrero).
*Donde quiera que los fieles laicos vivan su
vocación bautismal –en la familia, en la casa, en el trabajo- participan
activamente en la misión de la Iglesia de santificar al mundo (Discurso, 5 de
febrero).
*El encuentro auténtico con Dios lleva al hombre a
reconocer su pobreza e insuficiencia, sus limitaciones y su pecado (Ángelus, 7
de febrero).
*Si verdaderamente nos hemos encontrado con Jesús,
no podemos menos de dar testimonio de él a todos aquellos que aún no han
cruzado su mirada con él (Mensaje, 22 de febrero).
ABRIL
*Todo discípulo de Cristo, también cada uno de
nosotros, está llamado a ser testigo (Audiencia, 7 de abril).
MAYO
*En el encuentro con Cristo y en el amor mutuo
experimentamos en nosotros la vida misma de Dios, que permanece en nosotros
con su amor perfecto, total, eterno (Discurso, 2 de mayo).
*No hay nada más grande para el hombre, ser mortal
y limitado, que participar en la vida de amor de Dios (Discurso, 2 de mayo).
*Sabemos que todo lo que hacemos por el nombre de
Jesús, aunque sea humilde, nos transforma y nos configura un poco más al
hombre nuevo regenerado en Cristo (Discurso, 6 de mayo).
*La paz se funda en el amor de Dios y en la fidelidad a su Palabra (Regina
Caeli, 9 de mayo).
*Los cristianos
no buscan la hegemonía política o cultural, sino, dondequiera que se
comprometen, les mueve la certeza de que Cristo es la piedra angular de toda
construcción humana (Discurso, 21 de mayo).
*La política es un ámbito muy importante del ejercicio de la caridad
(Discurso, 21 de mayo).
*Se necesitan políticos auténticamente
cristianos,
pero antes aún fieles laicos que sean testigos de Cristo y del Evangelio en la
comunidad civil y política (Discurso, 21 de mayo).
*El compromiso social y político es un compromiso no fundado en ideologías o
intereses de parte, sino en la elección de servir al hombre y al bien común, a
la luz del Evangelio (Discurso, 21 de mayo).
JULIO
*¿Cómo podemos estar “en” el mundo sin ser “del” mundo? Os respondo:
precisamente gracias a la oración, al contacto personal con Dios (Encuentro, 4
de julio).
*Quien le sigue a Dios no tiene miedo ni siquiera
de renunciar a sí mismo, a su propia idea, porque “quien a Dios tiene nada le
falta”, como decía santa Teresa de Ávila (Encuentro, 4 de julio).
*La fe y la oración no resuelven los problemas,
pero permiten afrontarlos con nueva luz y fuerza, de manera digna del hombre,
y también de un modo más sereno y eficaz (Encuentro, 4 de julio).
*He aquí otro signo distintivo del cristiano: jamás
es individualista (Encuentro, 4 de julio).
*Habéis comprendido que Dios no os quita nada, sino
que os da “el ciento por uno” y hace eterna vuestra vida, porque Dios es Amor
infinito: el único que sacia nuestro corazón (Encuentro, 4 de julio).
*Lo esencial en nuestra vida es creer que Dios está
cerca de nosotros y nos ama en Jesucristo y, por tanto, cultivar un profundo
amor a él y a su Iglesia (Audiencia, 7 de julio).
AGOSTO
*Entablad y cultivad un diálogo personal con
Jesucristo,
en la fe (Mensaje, 6 de agosto).
*La elección de
creer en Cristo
y de seguirle no es fácil. Se ve obstaculizada por nuestras infidelidades
personales y por muchas voces que nos sugieren vías más fáciles (Mensaje, 6 de
agosto).
*También para nosotros es posible tener un contacto sensible con Jesús, meter,
por así decir, la mano en las señales de su Pasión, las señales de su amor. En
los Sacramentos, Él se nos acerca en modo particular, se nos entrega (Mensaje,
6 de agosto).
*Comprendemos ahora que nuestra fe personal en Cristo, nacida del diálogo con
Él, está vinculada a la fe de la Iglesia: no somos creyentes aislados, sino
que, mediante el Bautismo, somos miembros de esta gran familia, y es la fe
profesada por la Iglesia la que asegura nuestra fe personal (Mensaje, 6 de
agosto).
*La victoria que nace de la fe es la del amor (Mensaje, 6 de agosto).
*Cristo no es un bien sólo para nosotros mismos, sino que es el bien más
precioso que tenemos que compartir con los demás (Mensaje, 6 de agosto).
*El encuentro con el Hijo de Dios proporciona un dinamismo nuevo a toda la
existencia (Mensaje, 6 de agosto).
*Inmersos en su Misterio pascual, hemos sido hechos partícipes de su victoria
sobre el pecado y sobre la muerte (Homilía, 15 de agosto).
*Hemos sido “incorporados” también en el hombre
nuevo, en Cristo resucitado, y así la vida de la Resurrección ya está presente
en nosotros (Homilía, 15 de agosto).
*No nos limitemos a admirar a María en su destino
de gloria, como una persona muy lejana de nosotros (Homilía, 15 de agosto).
SEPTIEMBRE
*La plena madurez de la persona, su estabilidad interior, se basan en la
relación con Dios, relación que pasa por el encuentro con Jesucristo (Ángelus,
5 de septiembre).
*Si hemos aceptado la verdad de Cristo y hemos comprometido nuestra vida por
él, no puede haber separación entre lo que creemos y lo que vivimos (Discurso,
18 de septiembre).
*Cada uno de nuestros pensamientos, palabras y
obras deben buscar la gloria de Dios y la extensión de su reino (Discurso, 18
de septiembre).
*Sin la vida de oración, sin la transformación
interior que se lleva a cabo a través de la gracia de los sacramentos, no
podemos irradiar a Cristo (Discurso, 18 de septiembre).
*La Palabra de Dios revela la naturaleza filial y
relacional de nuestra vida (Exhortación Apostólica-22, 30 de septiembre).
*La Palabra divina nos introduce a cada uno en el
coloquio con el Señor: el Dios que habla nos enseña cómo podemos hablar con Él
(Exhortación Apostólica-24, 30 de septiembre).
*La Sagrada Escritura nos muestra que el pecado del
hombre es esencialmente desobediencia y «no escuchar» (Exhortación
Apostólica-26, 30 de septiembre).
*La relación entre Cristo, Palabra del Padre, y la Iglesia no puede ser
comprendida como si fuera solamente un acontecimiento pasado, sino que es una
relación vital, en la cual cada fiel está llamado a entrar personalmente
(Exhortación Apostólica-51, 30 de septiembre).
*Cuando el hombre, aunque sea frágil y pecador, sale sinceramente al encuentro
de Cristo, comienza una transformación radical (Exhortación Apostólica-50, 30
de septiembre).
*La Palabra de Dios está en la base de toda
espiritualidad auténticamente cristiana (Exhortación Apostólica-86, 30 de
septiembre).
*Los laicos están llamados a ejercer su
tarea profética, que se deriva directamente del bautismo, y a testimoniar el
Evangelio en la vida cotidiana dondequiera que se encuentren (Exhortación
Apostólica-94, 30 de septiembre).
*Nuestra responsabilidad no se limita a sugerir al
mundo valores compartidos; hace falta que se llegue al anuncio explícito de la
Palabra de Dios. Sólo así seremos fieles al mandato de Cristo (Exhortación
Apostólica-98, 30 de septiembre).
*Que el anuncio de la Palabra de Dios requiere el testimonio de la propia vida
es algo que la conciencia cristiana ha tenido bien presente desde sus
orígenes. Cristo mismo es testigo fiel y veraz, testigo de la Verdad
(Exhortación Apostólica-98, 30 de septiembre).
*El Evangelio nos recuerda que cada momento de nuestra existencia es
importante y debe ser vivido intensamente, sabiendo que todos han de rendir
cuentas de su propia vida (Exhortación Apostólica-99, 30 de septiembre).
*La misma Palabra de Dios reclama la necesidad de nuestro compromiso en el
mundo y de nuestra responsabilidad ante Cristo, Señor de la Historia
(Exhortación Apostólica-99, 30 de septiembre).
*Al anunciar el Evangelio, démonos ánimo mutuamente para hacer el bien y
comprometernos por la justicia, la reconciliación y la paz (Exhortación
Apostólica-99, 30 de septiembre).
*La Palabra de Dios impulsa al hombre a entablar relaciones animadas por la
rectitud y la justicia; da fe del valor precioso ante Dios de todos los
esfuerzos del hombre por construir un mundo más justo y más habitable
(Exhortación Apostólica-100, 30 de septiembre).
*El Señor ensalza la sencillez de corazón de quien reconoce a Dios como la
verdadera riqueza, pone en Él la propia esperanza, y no en los bienes de este
mundo (Exhortación Apostólica-107, 30 de septiembre).
*Nuestra relación personal y comunitaria con Dios depende del aumento de
nuestra familiaridad con la Palabra divina (exhortación Apostólica-124, 30 de
septiembre).
*Que cada jornada nuestra esté marcada por el encuentro renovado con Cristo,
Verbo del Padre hecho carne. Él está en el principio y en el fin, y «todo se
mantiene en él» [Col 1,17]
(Exhortación Apostólica-124, 30 de septiembre).
*Hagamos silencio para escuchar la Palabra de Dios y meditarla (Exhortación
Apostólica-124, 30 de septiembre).
OCTUBRE
*El compromiso socio político, con los recursos espirituales y las actitudes
que requiere, es una vocación alta, a la que la Iglesia invita a responder con
humildad y determinación (Mensaje, 12 de octubre).
*Es importante el sacramento de la Penitencia. Me enseña a mirarme con los
ojos de Dios, y me obliga a ser honesto conmigo mismo. Me lleva a la humildad
(Carta, 18 de octubre).
*Es importante mantenerse en camino, sin ser escrupulosos, teniendo conciencia
agradecida de que Dios siempre está dispuesto al perdón. Pero también sin la
indiferencia, que nos hace abandonar la lucha por la santidad y la superación
(Carta, 18 de octubre).
*Cuando recibo el perdón, aprendo también a
perdonar a los demás (Carta, 18 de octubre).
NOVIEMBRE
*La santidad, imprimir a Cristo en nosotros mismos, es el objetivo de la vida
del
cristiano (Ángelus, 1 de noviembre).
*La eternidad no es un continuo sucederse de días del calendario, sino algo
así como el momento pleno de satisfacción, en el cual la totalidad nos abraza
y nosotros abrazamos la totalidad del ser, de la verdad, del amor (Ángelus, 1
de noviembre).
*De la contemplación del amor de Cristo por nosotros nacen la fuerza y la
alegría de responder con el mismo amor, poniendo nuestra vida al servicio de
Dios y de los hermanos (Audiencia, 3 de noviembre).
*Sólo la luz del Señor, su fuerza y su amor nos limpia, nos purifica y nos da
el camino recto (Audiencia, 3 de noviembre).
*Parece de particular urgencia el compromiso en la formación del laicado
católico en la doctrina social de la Iglesia (Mensaje, 3 de noviembre).
*Esta renovación en Cristo se realiza en lo más íntimo de la persona: mientras
continúa la lucha contra el pecado es posible progresar en la virtud, tratando
de dar una respuesta plena y pronta a la gracia de Dios (Homilía, 4 de
noviembre).
*La búsqueda de las «cosas de arriba» no quiere decir que el cristiano deba
descuidar sus obligaciones y tareas terrenas; pero debe evitar perderse en
ellas, como si tuvieran un valor definitivo (Homilía, 4 de noviembre).
*La referencia a las realidades del cielo es una invitación a reconocer la
relatividad de lo que está destinado a pasar, frente a los valores que no
sufren la erosión del tiempo (Homilía, 4 de noviembre).
*El auténtico creyente, en toda época, experimenta en la liturgia la
presencia, la primacía y la obra de Dios (Mensaje, 4 de noviembre).
*Privado de la luz de la fe todo el universo acaba encerrado dentro de un
sepulcro sin futuro, sin esperanza (Mensaje, 4 de noviembre).
*Nuestro sumergirnos en la muerte y resurrección de Cristo mediante el
sacramento del Bautismo, nos impulsa cada día a liberar nuestro corazón del
peso de las cosas materiales, de un vínculo egoísta con la «tierra», que nos
empobrece y nos impide estar disponibles y abiertos a Dios y al prójimo
(mensaje, 4 de noviembre).
*Para el cristiano el ayuno no tiene nada de intimista, sino que abre
mayormente a Dios y a las necesidades de los hombres, y hace que el amor a
Dios sea también amor al prójimo (Mensaje, 4 de noviembre).
*El afán de poseer provoca violencia, prevaricación
y muerte; por esto la Iglesia, especialmente en el tiempo cuaresmal, recuerda
la práctica de la limosna,
es decir, la capacidad de compartir (Mensaje, 4 de noviembre).
*La práctica de la limosna nos recuerda el primado de Dios y la atención hacia
los demás, para redescubrir a nuestro Padre bueno y recibir su misericordia
(Mensaje, 4 de noviembre).
*Una vida cristiana vivida en plenitud habla sin palabras (Discurso, 15 de
noviembre).
*Necesitamos hombres y mujeres que hablen con su vida, que sepan comunicar el
Evangelio, con claridad y valor, con la transparencia de las acciones, con la
pasión gloriosa de la caridad (Discurso, 15 de noviembre).
*Todo creyente siente la necesidad de conformarse a los sentimientos del
Corazón de Cristo para amar a Dios y al prójimo como el mismo Cristo ama
(Audiencia, 24 de noviembre).
*¿Cuál es, pues, el camino que debe recorrer quien quiere ser discípulo? Es el
camino del Maestro, es el camino de la obediencia total a Dios (Homilía, 20 de
noviembre).
DICIEMBRE
*También hoy, en una sociedad cada vez más globalizada,
los cristianos están llamados a dar su aportación
preciosa al fatigoso y apasionante compromiso por la justicia, al desarrollo
humano integral y a la recta ordenación de las realidades humanas (Mensaje, 8
de diciembre).
*Los cristianos, por su parte, están llamados por la misma fe en Dios, Padre
del Señor Jesucristo, a vivir como hermanos que se encuentran en la Iglesia y
colaboran en la edificación de un mundo
en el que las personas y los pueblos no harán daño (Mensaje, 8 de diciembre).
*La paciencia y la constancia son precisamente síntesis entre el empeño humano
y la confianza en Dios (Ángelus, 12 de diciembre).
*Todo cristiano, en virtud del Bautismo, ha recibido la dignidad profética; y
cada uno debe redescubrirla y alimentarla, escuchando asiduamente la Palabra
divina (Ángelus, 12 de diciembre).
*Deseo reafirmar, por tanto, la urgencia de la formación humana y cristiana de
los niños y de los jóvenes, porque estos están gravemente expuestos a los
riesgos de la desviación (Carta, 14 de diciembre).
*Es necesario formar a hombres y mujeres de personalidad fuerte, de fe sólida
y de vida cristiana coherente (Carta, 14 de diciembre).
*En los diversos ambientes de la vida, los cristianos están llamados a ser
agentes de verdad y testigos valientes del Evangelio (Carta, 14 de diciembre).
*La paciencia y la constancia cristiana no son sinónimo de apatía o de
resignación (Homilía, 16 de diciembre).
*También el hombre puede ser, con Dios, un buen agricultor, que ama la
historia y la construye en profundidad, reconociendo y contribuyendo a hacer
crecer las semillas del bien que el Señor ha dado (Homilía, 16 de diciembre).
*La conciencia, la capacidad del hombre para reconocer la verdad, le impone al
mismo tiempo el deber de encaminarse hacia la verdad, de buscarla y de
someterse a ella allí donde la encuentre (Discurso, 20 de diciembre).
*Conciencia es capacidad de verdad y obediencia en relación con la verdad, que
se muestra al hombre que busca con corazón abierto (Discurso, 20 de
diciembre).
*Para poder ser auténticos discípulos de Cristo, una ayuda esencial nos viene
de la meditación diaria de la Palabra de Dios (Homilía, 31 de diciembre).
*El lugar privilegiado de la escucha de la Palabra de Dios es la celebración
de la Eucaristía (Homilía, 31 de
diciembre).
AÑO 2011
ENERO
*Los cristianos están llamados a dar su aportación preciosa al fatigoso y
apasionante compromiso por la justicia, al desarrollo humano integral y a la
recta ordenación de las realidades humanas (Discurso, 10 de enero).
*Las Bienaventuranzas son un nuevo programa de vida, para liberarse de los
falsos valores del mundo y abrirse a los verdaderos bienes, presentes y
futuros (Ángelus, 30 de enero).
FEBRERO
*La vida cristiana no crece si no se alimenta con la participación en la
liturgia, de modo particular en la santa misa dominical, y con la oración
personal diaria, con el contacto personal con Dios (Audiencia, 9 de febrero).
*El camino con Cristo, ir con Cristo, «el Camino», no es un peso añadido al ya
suficientemente duro fardo de nuestra vida (Audiencia, 16 de febrero).
*Ésta es la fe: ser amado por Dios y dejarse amar por Dios en Jesucristo. Este
dejarse amar es la luz que nos ayuda a llevar el peso de cada día (Audiencia,
16 de febrero).
*Oremos al Señor para que nos ayude a encontrar esta santidad, dejarse amar
por Dios, que es la vocación de todos y la verdadera redención (Audiencia, 16
de febrero).
*En la conciencia moral Dios habla a cada persona e invita a defender la vida
humana en todo momento (Discurso, 26 de febrero).
*En la conciencia, el hombre en su integridad —inteligencia, emotividad,
voluntad— realiza su vocación al bien (Discurso, 26 de febrero).
*Todo el hombre, en efecto, queda herido cuando su actuación va contra el
dictamen de su conciencia (Discurso, 26 de febrero).
*Quien cree en Dios, Padre lleno de amor por sus hijos, pone en primer lugar
la búsqueda de su reino, de su voluntad (Ángelus, 27 de febrero).
*La fe en la Providencia, de hecho, no exime de la ardua lucha por una vida
digna, sino que libera de la preocupación por las cosas y del miedo del mañana
(Ángelus, 27 de febrero).
*En todo caso, el cristiano se distingue por su absoluta confianza en el Padre
celestial, como Jesús (Ángelus, 27 de febrero).
MARZO
*Seguir a Cristo significa compartir su pasión, su cruz, seguirlo hasta el
fondo, y esta participación en la suerte del Maestro une profundamente a él
(Discurso, 4 de marzo).
*La vida cristiana comienza con una llamada y es siempre una respuesta, hasta
el final (Discurso, 4 de marzo).
*Dios es tan grande que tiene tiempo para cada uno de nosotros, me conoce, nos
conoce a cada uno por nombre, personalmente. Cada uno de nosotros ha recibido
una llamada personal (Discurso, 4 de marzo).
* Dios, el Señor, me ha llamado a mí, me llama a mí, me conoce, espera mi
respuesta como esperaba la respuesta de María, como esperaba la respuesta de
los Apóstoles (Discurso, 4 de marzo).
*Dios
me llama: este hecho debería impulsarnos a estar atentos a la voz de Dios,
atentos a su Palabra, a su llamada a mí, a fin de responder, a fin de realizar
esta parte de la historia de la salvación para la que me ha llamado a mí
(Discurso, 4 de marzo).
*Esta es la humildad que es preciso aprender, la humildad de Dios (Discurso, 4
de marzo).
*Debemos vernos siempre a la luz de Dios (Discurso, 4 de marzo).
*Quien tiene la gracia de conocer a Jesús, especialmente a través de la
lectura del santo Evangelio, queda fascinado con él (Ángelus, 6 de marzo).
*Que la Palabra de Dios impregne toda nuestra vida, nuestro pensamiento y
nuestra acción (Ángelus, 6 de marzo).
*Os exhorto a dedicar tiempo cada día a la Palabra de Dios, a alimentaros de
ella, a meditarla continuamente (Ángelus, 6 de marzo).
ABRIL
*Toda la existencia cristiana conoce una única ley suprema, la que san Pablo
expresa en una fórmula que aparece en todos sus escritos: en Cristo Jesús
(Audiencia, 13 de abril).
*La santidad, la plenitud de la vida cristiana no consiste en realizar
empresas extraordinarias, sino en unirse a Cristo, en vivir sus misterios, en
hacer nuestras sus actitudes, sus pensamientos, sus comportamientos
(Audiencia, 13 de abril).
*La santidad se mide por la estatura que Cristo alcanza en nosotros, por el
grado como, con la fuerza del Espíritu Santo, modelamos toda nuestra vida
según la suya (Audiencia, 13 de abril).
*Una vida santa no es fruto principalmente de nuestro esfuerzo, de nuestras
acciones, porque es Dios, el tres veces santo, quien nos hace santos; es la
acción del Espíritu Santo la que nos anima desde nuestro interior; es la vida
misma de Cristo resucitado la que se nos comunica y la que nos transforma
(Audiencia, 13 de abril).
*La santidad tiene, por tanto, su raíz última en la gracia bautismal, en ser
insertados en el Misterio pascual de Cristo, con el que se nos comunica su
Espíritu, su vida de Resucitado (Audiencia, 13 de abril).
*Para que el amor pueda crecer y dar fruto en el alma como una semilla buena,
cada cristiano debe escuchar de buena gana la Palabra de Dios y cumplir su
voluntad con la ayuda de su gracia, participar frecuentemente en los
sacramentos, sobre todo en la Eucaristía, y en la sagrada liturgia, y
dedicarse constantemente a la oración, a la renuncia de sí mismo, a servir
activamente a los hermanos y a la práctica de todas las virtudes (Audiencia,
13 de abril).
*Todos estamos llamados a la santidad: es la medida misma de la vida cristiana
(Audiencia, 13 de abril).
*No tengamos miedo de tender hacia lo alto, hacia las alturas de Dios; no
tengamos miedo de que Dios nos pida demasiado; dejémonos guiar en todas las
acciones cotidianas por su Palabra, aunque nos sintamos pobres, inadecuados,
pecadores: será él quien nos transforme según su amor (Audiencia, 13 de
abril).
*Todos tenemos necesidad de una conversión que acoja a Jesús en su ser-Dios y
ser-Hombre. Tenemos necesidad de la humildad del discípulo que cumple la
voluntad del Maestro (Homilía, 21 de abril).
*Cristo resucitado de entre los muertos es el fundamento de nuestra fe
(Audiencia, 27 de abril).
*La fe en Cristo resucitado transforma la existencia, actuando en nosotros una
resurrección continua (Audiencia, 27 de abril)
*En la resurrección de Jesús comienza una nueva condición del ser hombres, que
ilumina y transforma nuestro camino de cada día y abre un futuro
cualitativamente diferente y nuevo para toda la humanidad (Audiencia, 27 de
abril).
*Participando desde ahora en la vida de Cristo resucitado debemos vivir como
hombres nuevos en este mundo, en el corazón de la ciudad terrena (Audiencia,
27 de abril).
*La caridad resume y compendia «los bienes del cielo»: la caridad que, con la
fe y la esperanza, representa la gran regla de vida del cristiano y define su
naturaleza profunda (Audiencia, 27 de abril).
*Nosotros, los cristianos, creyendo firmemente que la resurrección de Cristo
ha renovado al hombre sin sacarlo del mundo donde construye su historia,
debemos ser los testigos luminosos de esta vida nueva que la Pascua ha traído
(Audiencia, 27 de abril).
*La Pascua es un don que se ha de acoger cada vez más profundamente en la fe,
para poder actuar en cada situación, con la gracia de Cristo, según la lógica
de Dios, la lógica del amor (Audiencia, 27 de abril).
*Testimoniar cada día la alegría del Señor resucitado significa vivir siempre
en «forma pascual» y hacer resonar el gozoso anuncio de que Cristo no es una
idea o un recuerdo del pasado, sino una Persona que vive con nosotros, para
nosotros y en nosotros; y con él, para él y en él podemos hacer nuevas todas
las cosas (Audiencia, 27 de abril).
AGOSTO
*Pensar según el mundo es dejar aparte a Dios, no aceptar su designio de amor,
casi impedirle cumplir su sabia voluntad (Ángelus, 28 de agosto).
SEPTIEMBRE
*Dios sabe transformar en amor incluso las cosas difíciles y agobiantes de
nuestra vida. Lo importante es que “permanezcamos” en la vid, en Cristo
(Homilía, 22 de septiembre).
*Cristo no se interesa tanto por las veces que flaqueamos o caemos en la vida,
sino por las veces que nosotros, con su ayuda, nos levantamos (Discurso, 24 de
septiembre).
*Sí, vosotros sois la luz del mundo, porque Jesús es vuestra luz (Discurso, 24
de septiembre).
*Vosotros sois cristianos, no porque hacéis cosas especiales y
extraordinarias, sino porque Él, Cristo, es vuestra, nuestra vida. Vosotros
sois santos, nosotros somos santos, si dejamos que su gracia actúe en nosotros
(Discurso, 24 de septiembre).
*Permitid que Cristo arda en vosotros, aun cuando ello comporte a veces
sacrificio y renuncia (Discurso, 24 de septiembre).
*Tened la osadía de ser santos brillantes, en cuyos ojos y corazones
resplandezca el amor de Cristo, llevando así la luz al mundo (Discurso, 24 de
septiembre).
*Para que el poder de su misericordia pueda tocar nuestros corazones, es
necesario que nos abramos a Él, se necesita la libre disponibilidad para
abandonar el mal, superar la indiferencia y dar cabida a su Palabra (Homilía,
25 de septiembre).
*Dios respeta nuestra libertad. No nos coacciona. Él espera nuestro “sí” y,
por decirlo así, lo mendiga (Homilía, 25 de septiembre).
*La vida cristiana es una pro-existencia: un ser para el otro, un compromiso
humilde para con el prójimo y con el bien común (Homilía, 25 de septiembre).
*Cada cristiano y la comunidad de los creyentes en su conjunto están llamados
a una conversión continua (Discurso, 25 de septiembre).
OCTUBRE
*Firmemente anclados en la fe en la piedra angular que es Cristo,
permanezcamos en él como el sarmiento que no puede dar fruto por sí mismo si
no permanece en la vid (Ángelus, 2 de octubre).
*En Cristo está el todo, la plenitud; necesitamos tiempo para hacer nuestra
una de las dimensiones de su misterio (Homilía, 9 de octubre).
*Todos estamos invitados a ser comensales del Señor, a entrar con la fe en su
banquete, pero debemos llevar y custodiar el vestido nupcial, la caridad,
vivir un profundo amor a Dios y al prójimo (Homilía, 9 de octubre).
*¡No tengáis miedo de vivir y dar testimonio de la fe en los distintos ámbitos
de la sociedad, en las múltiples situaciones de la existencia humana!
(Homilía, 9 de octubre).
OCTUBRE
*El compromiso misionero de los creyentes saca fuerza y vigor del
descubrimiento cotidiano de su amor, que nunca puede faltar (Carta Apostólica,
11 de octubre).
*El cristiano no puede pensar nunca que creer es un hecho privado (Carta
Apostólica, 11 de octubre).
NOVIEMBRE
*La santidad es la vocación originaria de todo bautizado (Ángelus, 1 de
noviembre).
*Todos los miembros del pueblo de Dios están llamados a ser santos (Ángelus, 1
de noviembre).
*Todos los estados de vida pueden llegar a ser, con la acción de la gracia y
con el esfuerzo y la perseverancia de cada uno, caminos de santificación (Angelus,
1 de noviembre).
*La Ley de Dios, centro de la vida, exige la escucha del corazón, una escucha
hecha de obediencia no servil, sino filial, confiada, consciente (Audiencia, 9
de noviembre).
*La escucha de la Palabra es encuentro personal con el Señor de la vida
(Audiencia, 9 de noviembre).
*El cumplimiento de la Ley es seguir a Jesús, ir por el camino de Jesús, en
compañía de Jesús (Audiencia, 11 de noviembre).
*Dejemos al Señor que nos ponga en el corazón este amor a su Palabra, y nos
done tenerlo siempre a él y su santa voluntad en el centro de nuestra vida
(Audiencia, 11 de noviembre).
*Vuestro papel de cristianos consiste en participar activamente en la vida de
la sociedad, tratando de hacerla cada vez más humana, caracterizada cada vez
más por la libertad, la justicia y la solidaridad auténticas (Discurso, 11 de
noviembre).
*La conciencia del retorno glorioso del Señor Jesús nos impulsa a vivir en una
actitud de vigilancia, esperando su manifestación en la constante memoria de
su primera venida (Ángelus, 13 de noviembre).
*Dios llama a cada hombre a la vida y le entrega talentos, confiándole al
mismo tiempo una misión que cumplir (Ángelus, 13 de noviembre).
*La conversión sólo es posible apoyándose en convicciones de fe consolidadas
por una catequesis auténtica (Exhort. Apost. Africae Munus 32, 19 de
noviembre).
*La conversión se vive de manera especial en el Sacramento de la
Reconciliación (Exhort. Apost. Africae Munus 32, 19 de noviembre).
*La Iglesia se hace presente y activa en la vida del mundo a través de sus
miembros laicos (Exhort. Apost. Africae Munus 128, 19 de noviembre).
*Los laicos, hombres y mujeres, están llamados ante todo a la santidad, y a
vivir esta santidad en el mundo (Exhort. Apost. Africae Munus 129, 19 de
noviembre).
*El bautizado sabe que su decisión de seguir a Cristo puede llevarle a grandes
sacrificios, incluso el de la propia vida (Homilía, 20 de noviembre).
*El cristiano es un constructor incansable de comunión, de paz y solidaridad,
esos dones que Jesús mismo nos ha dado (Homilía, 20 de noviembre).
*Estáis llamados a dar un testimonio transparente de la importancia de la
cuestión de Dios en todos los campos del pensamiento y de la acción (Discurso,
25 de noviembre).
DICIEMBRE
*Los discípulos de Cristo Redentor saben que sin la atención al otro, sin el
perdón, sin el amor incluso a los enemigos, ninguna comunidad humana puede
vivir en paz; y esto comienza en la primera y fundamental sociedad que es la
familia (Discurso, 2 de diciembre).
*En la necesaria colaboración en favor del bien común también con quienes no
comparten nuestra fe, debemos hacer presentes los verdaderos y profundos
motivos religiosos de nuestro compromiso social (Discurso, 2 de diciembre).
AÑO 2012
ENERO
*Nadie puede hacerse cristiano sólo por su propia voluntad; también el ser
cristiano es un don que precede a nuestro hacer: debemos renacer con un nuevo
nacimiento (Ángelus, 8 de diciembre).
*El «seguir a Cristo» exige la aventura personal de su búsqueda, de ir con él,
pero implica también salir del encierro del yo, romper el individualismo que a
menudo caracteriza a la sociedad de nuestro tiempo, para sustituir el egoísmo
con la comunidad del hombre nuevo en Jesucristo (Discurso,
20 de enero).
FEBRERO
*Ser cristiano quiere decir superar esta tentación originaria, que también es
el núcleo del pecado original: ser como Dios, pero sin Dios; ser cristiano es
ser verdadero, sincero, realista (Lectio divina, 23 de febrero).
*La humildad es sobre todo verdad, vivir en la verdad, aprender la verdad,
aprender que mi pequeñez es precisamente mi grandeza, porque así soy
importante para el gran entramado de la historia de Dios con la humanidad (Lectio
divina, 23 de febrero).
*Esto es el inicio del ser cristiano: vivir la verdad. Y sólo vivo bien
viviendo la verdad (Lectio divina, 23 de febrero).
*Vivir contra la verdad siempre es vivir mal. ¡Vivamos la verdad! Aprendamos
este realismo: no querer aparentar, sino agradar a Dios y hacer lo que Dios ha
pensado de mí y para mí, aceptando así también al otro (Lectio divina, 23 de
febrero).
*Cuando soy humilde tengo la libertad también de ir a contracorriente de una
opinión dominante, del pensamiento de otros, porque la humildad me da la
capacidad, la libertad de la verdad (Lectio divina, 23 de febrero).
MARZO
*El discípulo de Jesús no responde al mal con el mal, sino que es siempre
instrumento del bien, heraldo del perdón, portador de la alegría, servidor de
la unidad (Saludo, 24 de marzo).
*Para los católicos, esta contribución al bien común es también una exigencia
de esa dimensión esencial del evangelio que es la promoción humana, y una
expresión altísima de la caridad (Discurso, 26 de marzo).
*La Iglesia exhorta a todos sus fieles a ser también buenos ciudadanos,
conscientes de su responsabilidad de preocuparse por el bien de los demás, de
todos, tanto en la esfera personal como en los diversos sectores de la
sociedad (Discurso, 26 de marzo).
*Vale la pena, queridos hermanos, dedicar toda la vida a Cristo, crecer cada
día en su amistad y sentirse llamado a anunciar la belleza y bondad de su vida
a todos los hombres, nuestros hermanos (Homilía, 26 de marzo).
*Queridos amigos, no vacilen en seguir a Jesucristo. En él hallamos la verdad
sobre Dios y sobre el hombre. Él nos ayuda a derrotar nuestros egoísmos, a
salir de nuestras ambiciones y a vencer lo que nos oprime (Homilía, 28 de
marzo).
*El que obra el mal, el que comete pecado, es esclavo del pecado y nunca
alcanzará la libertad. Sólo renunciando al odio y a nuestro corazón duro y
ciego seremos libres, y una vida nueva brotará en nosotros (Homilía, 28 de
marzo).
ABRIL
*Quien cumple la voluntad del Señor y confía en él no sólo no pierde nada,
sino que encuentra el verdadero tesoro capaz de dar sentido a todo (Mensaje, 1
de abril).
MAYO
*Cada uno de nosotros es como un sarmiento, que sólo vive si hace crecer cada
día con la oración, con la participación en los sacramentos y con la caridad,
su unión con el Señor. Y quien ama a Jesús, la vid verdadera, produce frutos
de fe para una abundante cosecha espiritual (Regina caeli, 6 de mayo).
*No basta declararse cristianos para ser cristianos, y tampoco tratar de
realizar obras buenas. Hace falta configurarse con Jesús, con un lento,
progresivo esfuerzo de transformación del propio ser, a imagen del Señor, para
que, por gracia divina, todo miembro de su Cuerpo, que es la Iglesia, muestre
la necesaria semejanza con la Cabeza, Cristo Señor (Discurso, 13 de mayo).
*Sed fermento en la sociedad, sed cristianos presentes, emprendedores y
coherentes (Homilía, 13 de mayo).
*Cultura, voluntariado y trabajo
constituyen un trinomio indisoluble del compromiso diario del laicado
católico, que quiere hacer incisiva su pertenencia a Cristo y a la Iglesia,
tanto en el ámbito privado como en la esfera pública de la sociedad (Discurso,
19 de mayo).
*El voluntariado, recurso insustituible de la sociedad, conlleva no tanto dar
cosas cuanto darse a sí mismo en la ayuda concreta a los más necesitados
(Discurso, 19 de mayo).
*Por último, el trabajo no es sólo instrumento de ganancia individual, sino
también ocasión para expresar las propias capacidades dedicándose, con
espíritu de servicio, a la actividad profesional, ya sea obrera, agrícola,
científica o de otro tipo (Discurso, 19 de mayo).
*Vuestra acción debe estar animada por la caridad; esto significa aprender a
ver con los ojos de Cristo y dar al otro algo más que las cosas necesarias
exteriormente, darle la mirada, el gesto de amor que necesita (Discurso, 19 de
mayo).
JUNIO
*Nosotros no nos hacemos cristianos. Llegar a ser cristiano no es algo que
deriva de una decisión mía: «Yo ahora me hago cristiano». Ciertamente, también
mi decisión es necesaria, pero es sobre todo una acción de Dios conmigo: no
soy yo quien me hago cristiano, yo soy asumido por Dios, tomado de la mano por
Dios y, así, diciendo «sí» a esta acción de Dios, llego a ser cristiano (Lectio
divina, 11 de junio).
*El cristianismo no es algo puramente espiritual, algo solamente subjetivo,
del sentimiento, de la voluntad, de ideas, sino que es una realidad cósmica (Lectio
divina, 11 de junio).
*Lo que nos hace santos e inmaculados es la caridad (Audiencia, 20 de junio).
*Dios nos ha llamado a la existencia, a la santidad. Y esta elección es
anterior incluso a la creación del mundo (Audiencia, 20 de junio).
*La vocación a la santidad, es decir, a la comunión con Dios pertenece al plan
eterno de este Dios, un plan que se extiende en la historia y comprende a
todos los hombres y las mujeres del mundo (Audiencia, 20 de junio).
AGOSTO
*El amor a Cristo, a su Palabra, a la Verdad, no admite componendas. La Verdad
es Verdad, no hay componendas (Audiencia, 29 de agosto).
*La vida cristiana exige, por decirlo así, el «martirio» de la fidelidad
cotidiana al Evangelio, es decir, la valentía de dejar que Cristo crezca en
nosotros, que sea Cristo quien oriente nuestro pensamiento y nuestras acciones
(Audiencia, 29 de agosto).
*La oración no es tiempo perdido, no es robar espacio a las actividades,
incluso a las actividades apostólicas, sino que es exactamente lo contrario:
sólo si somos capaces de tener una vida de oración fiel, constante, confiada,
será Dios mismo quien nos dará la capacidad y la fuerza para vivir de un modo
feliz y sereno, para superar las dificultades y dar testimonio de él con
valentía (Audiencia, 29 de agosto).
SEPTIEMBRE
*Un punto clave en el que Dios y el hombre se diferencian es el orgullo: en
Dios no hay orgullo porque Él es toda la plenitud y tiende todo a amar y donar
vida; en nosotros los hombres, en cambio, el orgullo está enraizado en lo
íntimo y requiere constante vigilancia y purificación (Ángelus, 23 de
septiembre).
*Nosotros, que somos pequeños, aspiramos a parecer grandes, a ser los
primeros; mientras que Dios, que es realmente grande, no teme abajarse y
hacerse el último (Ángelus, 23 de septiembre).
OCTUBRE
*Encontrar la propia identidad en Cristo significa llegar a la comunión con
él, que no me anula, sino que me eleva a una dignidad más alta, la dignidad de
hijo de Dios en Cristo (Audiencia, 3 de octubre).
*El cristiano no debe ser tibio (Meditación, 8 de octubre).
*Cuando dejamos espacio al amor de Dios, nos hace semejantes a él, partícipes
de su misma caridad. Abrirnos a su amor significa dejar que él viva en
nosotros y nos lleve a amar con él, en él y como él (Mensaje, 15 de octubre).
*La fe nos invita a mirar hacia el futuro con la virtud de la esperanza,
esperando confiadamente que la victoria del amor de Cristo alcance su
plenitud. Por su parte, la caridad nos hace entrar en el amor de Dios que se
manifiesta en Cristo (Mensaje, 15 de octubre).
NOVIEMBRE
*El Cristianismo, antes que una moral o una ética, es acontecimiento del amor,
es acoger a la persona de Jesús (Audiencia, 14 de noviembre).
DICIEMBRE
*El hombre y la mujer no son fruto de la casualidad, sino que responden a un
designio de benevolencia de la razón eterna de Dios (Audiencia, 5 de
diciembre).
*Nuestra vocación no es simplemente existir en el mundo, estar insertados en
una historia, y tampoco ser sólo criaturas de Dios; es algo más grande: es ser
elegidos por Dios, antes aun de la creación del mundo, en el Hijo, Jesucristo
(Audiencia, 5 de diciembre).
*Dios pide que también nosotros nos convirtamos en signo de su acción en el
mundo (Audiencia, 5 de diciembre).
*La iniciativa divina precede a toda respuesta humana: es un don gratuito de
su amor que nos envuelve y nos transforma (Audiencia, 5 de diciembre).
AÑO 2013
FEBRERO
*Creer en Dios significa renunciar a los propios prejuicios y acoger el rostro
concreto en quien Él se ha revelado: el hombre Jesús de Nazaret. Y este camino
conduce también a reconocerle y a servirle en los demás (Ángelus, 3 de
febrero).
*Regenerados
quiere decir: ser cristiano no es simplemente una decisión de mi voluntad, una
idea mía (Discurso, 8 de febrero).
*Este volver a Dios solamente llega a ser una realidad concreta en nuestra
vida cuando la gracia del Señor penetra en nuestro interior y lo remueve
dándonos la fuerza de «rasgar el corazón» (Homilía, 13 de febrero).
*Cristo denuncia la hipocresía religiosa, el comportamiento que quiere
aparentar, las actitudes que buscan el aplauso y la aprobación (Homilía, 13 de
febrero).
*El verdadero discípulo no sirve a sí mismo o al “público”, sino a su Señor,
en la sencillez y en la generosidad (Homilía, 13 de febrero).
*La gracia de Cristo nos hace hombres nuevos, con aquella sorprendente novedad
que es participación en la vida misma de Jesús (Homilía, 13 de febrero).
Recopilado por: P. Mariano Esteban Caro
|